CECINA O JAMÓN?
Aburrido de esta rutina actual llamé a mi amigo el ciego y le pregunté qué me podía dar de comer al día siguiente. Me respondió que unas fabes con almejas y bacalao. Y allá que fui, al merendero que tiene en el pueblo leonés de sus ancestros.
Le llevé miel de la que compré en la aldea los míos y asistí al mismo y grandioso espectáculo que he descrito en mi entrada titulada LA CIEGUITA INTERESADA. Unos cuantos parientes y vecinos que se acercan al merendero y en la gran mesa de madera despliegan sus obsequios. Uno jamón, otro cecina, otro queso, otro chorizo, incluso uno su latilla de sardinas, todos llevan algo, y todos participamos de ese sagrado aperitivo entre las bromas habituales, que en esta ocasión se centraron en el primo de mi amigo, que había ido al otorrino a medirse la audición. En mala hora se le ocurrió decirlo, pues le llovieron toda clase de chascarrillos a costa del tamaño de sus pabellones auditivos.
La cieguita y mi amigo ya se casaron, y ví el vídeo de su boda. Está en VARELALIA, un blog hecho por Enrique Varela, colaborador de la ONCE y quien grabó el vídeo. Por cierto, que también es ciego. Un ciego grabando vídeos y que tiene un blog. Ya veis qué cosas hay en este mundo.
Había gente nueva, un ciego y su mujer, que participaban por primera vez del evento, y que se quedaron a comer. Él es un experto en embutidos y tiene una taberna en Salamanca, donde vende de los mejorcitos. O sea, un ciego al frente de una taberna, un ciego que cata quesos y embutidos con el tacto y el olor, y que les vende en Salamanca, en La Taberna de Guijuelo, que así se llama.
Surgió una discusión sobre qué era mejor, si el jamón o la cecina, y había partidarios de ambas cosas. Los del jamón argumentando sus excelencias, sobre todo el de Salamanca, lógico, y los de la cecina indicando que está en auge y habiéndola de varias clases, de vaca, de chivo, de caballo... Mi amigo creo que se inclinaba por la cecina y, por mi parte también por una razón bien sencilla: se tarda menos en curarla, con lo que puede salir antes a la venta y alimenta lo mismo. Desde luego, la cecina que había era exquisita, y el jamón no lo era tanto. En Castilla no tenemos tradición de cecina, pero en León sí.
Ví cómo hacía el ciego el bacalao, en cazuela de barro ancha y dándole sus meneíllos para sacarle la gelatina. Un bacalao excelente.
Y así pasé un día más del verano, en buena compañía, gente sencilla y amable, gente de un pueblo por el que pasa el camino de Santiago. El ciego me obsequió con un par de latas de bonito embotado y de tomate natural hecho por él. El vino, por supuesto de su cosecha. Facultad de Medicina.
Aburrido de esta rutina actual llamé a mi amigo el ciego y le pregunté qué me podía dar de comer al día siguiente. Me respondió que unas fabes con almejas y bacalao. Y allá que fui, al merendero que tiene en el pueblo leonés de sus ancestros.
Le llevé miel de la que compré en la aldea los míos y asistí al mismo y grandioso espectáculo que he descrito en mi entrada titulada LA CIEGUITA INTERESADA. Unos cuantos parientes y vecinos que se acercan al merendero y en la gran mesa de madera despliegan sus obsequios. Uno jamón, otro cecina, otro queso, otro chorizo, incluso uno su latilla de sardinas, todos llevan algo, y todos participamos de ese sagrado aperitivo entre las bromas habituales, que en esta ocasión se centraron en el primo de mi amigo, que había ido al otorrino a medirse la audición. En mala hora se le ocurrió decirlo, pues le llovieron toda clase de chascarrillos a costa del tamaño de sus pabellones auditivos.
La cieguita y mi amigo ya se casaron, y ví el vídeo de su boda. Está en VARELALIA, un blog hecho por Enrique Varela, colaborador de la ONCE y quien grabó el vídeo. Por cierto, que también es ciego. Un ciego grabando vídeos y que tiene un blog. Ya veis qué cosas hay en este mundo.
Había gente nueva, un ciego y su mujer, que participaban por primera vez del evento, y que se quedaron a comer. Él es un experto en embutidos y tiene una taberna en Salamanca, donde vende de los mejorcitos. O sea, un ciego al frente de una taberna, un ciego que cata quesos y embutidos con el tacto y el olor, y que les vende en Salamanca, en La Taberna de Guijuelo, que así se llama.
Surgió una discusión sobre qué era mejor, si el jamón o la cecina, y había partidarios de ambas cosas. Los del jamón argumentando sus excelencias, sobre todo el de Salamanca, lógico, y los de la cecina indicando que está en auge y habiéndola de varias clases, de vaca, de chivo, de caballo... Mi amigo creo que se inclinaba por la cecina y, por mi parte también por una razón bien sencilla: se tarda menos en curarla, con lo que puede salir antes a la venta y alimenta lo mismo. Desde luego, la cecina que había era exquisita, y el jamón no lo era tanto. En Castilla no tenemos tradición de cecina, pero en León sí.
Ví cómo hacía el ciego el bacalao, en cazuela de barro ancha y dándole sus meneíllos para sacarle la gelatina. Un bacalao excelente.
Y así pasé un día más del verano, en buena compañía, gente sencilla y amable, gente de un pueblo por el que pasa el camino de Santiago. El ciego me obsequió con un par de latas de bonito embotado y de tomate natural hecho por él. El vino, por supuesto de su cosecha. Facultad de Medicina.
17 comentarios:
Qué bien te cuidan, Manzacosas, qué bien te cuidan.
¡Hola hermano de generación! Qué bien te lo pasas... Todos te regalan productos naturales que seguro te harán estar cachas y con una salud excelente... Besotes, M.
Hola, MERCHE. Cachas, lo que se dice cachas, pues más bien no, pero procuro que no me falte de nada. Estamos ya en una edad provecta que merece un trato adecuado al cuerpo. Te dejé un comentario sobre lo de Polonia.
Y hola, PEDRO. Me cuido, me cuido yo solito, que si no me pasa lo de que el coronel no tiene quien le escriba. Un saludo.
Yo tambien te contesté al comentario sobre Polonia, pero veo que en tu blog NADA de NADA... Podrías haber escrito algo sobre el tema para difundirlo a nivel mundial ¿no? Es que no te das cuenta que si no hacemos algo, LOS CIUDADANOS, aunque sea escribiendo en nuestros humildes blogs (ya sé que es muy dificil que vayamos tirando bombas por ahí) pero la PALABRA tambien a veces es muy eficaz pero hace falta que TODOS cooperemos y no sentarnos a la bartola a ver qué pasa... Así, como te digo, nos comerán con patatas... Besotes, M.
A eso le llamó vivir a tope, disfrutar con los placeres que nos da la vida, aprender de los buenos amigos y descubrir lo mucho y valioso que hay más allá de nuestra puerta. Lo que nos cuentas daría para una novela, para una obra de teatro, para un poema.... para una épica de la amistad y el buen yantar. ¿Qué más se puede pedir en estos tiempos de desaceleraciones?. Pues,sí. Facultad de Medicina, que "ya es hora de pasearnos a cuerpo y pensar que, pues vivimos, anunciamos algo nuevo", que diría el poeta.
Gracias, FERNANDO, por tus elogios. Como ves, trato de vivir sacando partida a las cosas sencillas de la vida, lo que encuentro entre las buenas gentes que conozco. Harto estoy de los pijos y vanidosos, que se creen los amos del universo sin darse cuenta de que no son sino una pandilla de inútiles, a los que ni tan siquiera envidiamos.
El mes próximo espero ir a Donosti a por iuna langostita, comprada por mí donde las encuentro a buen precio, y que luego cuezo yo mismo y me la zampo en compañia de gente sencilla.
Sí, MERCHE. Ví tu contestación y no pongo nada en mi blog sobre el tema que comentas porque, sencillamente, no me creo que Rusia vaya a invadir Polonia. Te apuesto, lo que quieras, y si no al tiempo. Un saludo con el afecto de siempre.
¡A Donosti de nuevo a zamparte una langosta! Me quieres poner los dientes largos... Referente a lo de Polonia espero que tengas razón pero yo no apuesto nada porque eres muy listo y seguro que pierdo... ¡OJALÁ! Eso, tiempo al tiempo... Besotes, M.
¿O sea, que te vas a agenciar una buena langosta en Donosti y te la vas a preparar "ad maiorem gloriam" del placer que procura cepillarse el marisco en buena compañía?. Me parece una excelente idea y más aún si eres maestro en el arte de la buena preparación del marisco de alto nivel. Espero, no obstante, que también seas experto artesano en los manjares de tu tierra burgalesa, que también es la mía. ¿Sabes que Burgos es un espacio de confluencia gastronómica, donde es posible tocar el cielo en eso del buen yantar a poco que te lo propongas?. Háblame de esas cualidades, que la curiosidad me invade al respective.
Pues sñi, MERCHE. Mejor que no apuestes porque perderías seguro, Y repito que al tiempo. Pero espera un poco, que mi langostita de Donoti puede que tarde un mes o más. Un saludo.
Sí, FERNANDO. Ya sabía que Burgos era tu tierra. Como todas, tiene su buena gastronomìa. Para empezar el cordero asado, y repito que el mejor que hay ahora lo tienes en Casa Antón, en Lerma. y que hay que huir de los garajes. Tienes luego un excelente bacalao en Aranda (sé ir pero no me acuerdo del nombre) y en el propio Burgos hay de todo. Lo que màs fama tiene es la olla podrida (en realidad se llama poderida, de poder) pero es difícil encontrar un sitio bueno. Todos presumen, pero el tema es muy cambiante; hay un Mesón en San Pedro de Cardeña que la prepara bien, pero por encargo. No sigo, porque esto sería eterno. En realidad los platos de Burgos están acordes con su frío invierno, y esos son precisamente los mejores. Bueno, un saludo, y seguiremos contándonos cosas.
A veces hay cosas extraordinarias a nuestro ladito que con esta endiablada prisa nos pasan desapercibidas.
¡Buen provecho!
Yo no soy muy partidario de la cecina de león en particular. Y más en general, tampoco con la elaborada con cualquiera de los grandes felinos.
La cecina era un producto más luctuoso que el jamón. Se moría el burro... Algo había que hacer. El cerdo sin embargo nunca fallecía por motivos accidentales.
Hola Manzanita, a este paso no te rebajo la barriguita.
¿Cómo tamos?
Volveré
Hola, CAMPILLO. cuánto tiempo... Tines mucha razón, y gracias.
UCRA. Hay una cecina que es excepcional, y es la de chivo, muy difícil de encontrar. También la de caballo es cada vez más difícil. Además, no vamos a estar toda la vida viviendo del cerdo, que todo se pega...
BIPO. Tamobien, gracias, pero sin barriga.
Gracias a todos y un saludo.
Manza, tus amigos "los no-pájaros" y tú, ¿no habláis de mujeres? jeje
Hola, BIPO. Pues mira, sí hablamos de mujeres, pero me merecen mucho respeto, más incluso que los hombres, y es porque tienen la posibilidad de tener criaturas, lo que me da mucha envidia. De verdad que las respeto y las admiro. Un saludo
Sin lugar a dudas la cecina, y no como dice alguno de tus contertulios, antes podría darse el caso de muerte natural,( y aprovechaban) pero eso era antes.
En mi casa siempre se han hecho cecina de vaca. BUENÍSIMAS
Tengo un hermano que tiene la misma mano de la madre que nos pario, y le salen de miedo.
Hola, FUEN. Pues estoy de acuerdo contigo en que la cecina. Al menos me sabe mejor y además estoy harto de tanto jamón y tanta tontería de pata negra. Qué suerte tienes con que tu familia sepa hecerla. Un saludo. Manzacosas
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